31 mayo 2015

Cuando la vida vuelve




CUANDO LA VIDA VUELVE

a ser octubre
me agarro fuerte al mar
de los suicidas,
a la noche de llanto
de sus solas,
a tu piel sugestiva
de deseo
y a tus ojos de estrella
persuasiva.

Cuando la vida vuelve
a ser octubre,
y el metro aprieta y suda
en los vagones,
me subo al vértigo desnudo
de las ocho
y pongo el corazón
en tu perfume.

Cuando la vida vuelve...


Es uno de los poemas de Ángel M. Silva Ruiz que aparecen en su reciente Los mensajes perdidos que publica la Diputación de Badajoz en su remodelada colección Alcazaba. 

La infancia, el padre, el amor y la realidad destructiva recorren las tres partes en las que se organiza este libro que intenta recuperar esos mensajes perdidos, porque -explica el autor en la nota inicial- "Nunca quisimos dejar de ser el niño o el amante, pero, a menudo, los avatares de la vida los reducen, mutilan o eliminan de manera inflexible, de acuerdo con la normativa generalizada, y sus mensajes se pierden diluidos entre las voces monótonas y cotidianas."