23 marzo 2017

Historia natural de los dioses y los héroes



“El estudio comparativo de las mitologías del mundo nos hace ver la historia cultural de la humanidad como una unidad, pues encontramos que temas como el robo del fuego, el diluvio, el mundo de los muertos, el nacimiento virginal y el héroe resucitado se hallan en todas las partes del mundo, apareciendo por doquier en nuevas combinaciones, al tiempo que permanecen sólo unos pocos elementos, siempre los mismos, como en un caleidoscopio. En los relatos contados con ánimo de entretener, estos temas míticos se tratan con ligereza, con un espíritu obviamente de juego, mientras que en contextos religiosos se aceptan no sólo como verdades de hecho, sino incluso como revelaciones de aquellas verdades de las que toda la cultura es un testigo vivo, y de las cuales derivan tanto su autoridad espiritual como su poder temporal”, escribe Joseph Campbell en el prólogo del primer volumen de Las máscaras de Dios, una obra monumental de mitología comparada que ha empezado a publicar Atalanta con traducción de Isabel Cardona.
Revisado y puesto al día en 2016 por Sydney Yeager, Andrew Gurevich y Santiago Celaya con la supervisión de la Joseph Campbell Foundation, este primer volumen, centrado en la mitología primitiva, abre una serie de cuatro tomos que Campbell publicó entre 1959 y 1968. 
Reunió en ellos el trabajo de doce años en los que, tras haber estudiado las máscaras del héroe en El héroe de las mil caras. Psicoanálisis del mito, abordó las máscaras de la divinidad en las culturas prehistóricas y en las mitologías orientales y occidentales. El cuarto volumen, Mitología creativa, se centra en el fondo mitológico que subyace en las creaciones artísticas de la cultura europea y en los artistas, poetas y filósofos como creadores de mitos modernos.
Con una combinación de simbolismo comparativo, religión, mitología y filosofía, arqueología e historia del arte, filología y folclore, psicología y literatura, el propósito declarado de Campbell es elaborar "el primer esbozo de una historia natural de los dioses y los héroes que, en su forma final, debería incluir a todos los seres divinos –al igual que la zoología incluye a todos los animales y la botánica a todas las plantas–, sin considerar a ninguno sacrosanto o más alládel dominio científico. Porque, igual que en el mundo visible de los reinos vegetal y animal, en el mundo visionario de los dioses también ha habido una historia, una evolución, una serie de mutaciones gobernadas por leyes; y sacar a la luz tales leyes es la aspiración propia de la ciencia."
El prólogo al que pertenecen estas líneas se titula Hacia una historia natural de los dioses y los héroes. Y en ese título podría resumirse el sentido de esta obra fundamental, de unos volúmenes de los que Campbell escribía que contienen "muchas indicaciones que sugieren las maneras en que pueden ser utilizados por personas razonables para fines razonables, o por poetas para fines poéticos, o por insensatos para la necedad y el desastre."
Las personas razonables, los poetas y los insensatos tienen ya en las librerías el primer volumen. Los siguientes irán apareciendo en los próximos meses.